21 de febrer 2008

Tina Sabater, historiadora: Nuestro interés patrimonial nació con la Arqueològica Lu.liana en el siglo XIX

diariodemallorca.es 21-2-2008
La catedrática de la UIB presentó ayer en CaixaForum el CD-libro ´L´art gòtic a Mallorca. Pintura damunt taula´, "una publicación pionera en España e Italia"

M. ELENA VALLÉS. PALMA. En 2007, las imágenes motivaron el nuevo libro (Lleonard Muntaner) de Tina Sabater. A raíz de su obra La pintura mallorquina del siglo XV (2002), basado en su tesis doctoral, la profesora de Historia del Arte de la UIB decidió elaborar un catálogo digital de una parte de las pinturas tratadas en esa publicación. El texto llegó después, "a modo de estudio fresco y sincrónico de esta pintura".
-¿Por qué son tan importantes las imágenes del CD en este libro?
-A partir de mi tesis, conseguí un gran fondo fotográfico porque iba buscando las inspiraciones de los pintores mallorquines en obras foráneas. Pensé que publicar todo aquello era importante para futuras investigaciones en otros campos, porque la pintura gótica es una fuente de información para los estudios de indumentaria o instrumentos domésticos.
-¿Hasta qué punto es importante el papel de la iglesia en la cultura de la época gótica?
-Fundamental, pero cabe tener en cuenta también el papel que desempeñaron las iniciativas privadas durante esta época en relación con etapas anteriores, porque las personas privadas pagaban retablos para las capillas y así se "ganaban" el cielo.
-¿Por qué la pintura suponía en aquella época un bien de poco valor patrimonial?
-En los inventarios privados y eclesiásticos no figuran determinadas obras que sabemos que se poseían. Por ejemplo, en la capilla de la Reina de la Almudaina, un inventario del siglo XIV nombra las cortinas que tapaban un retablo que no aparece catalogado en la misma nómina de bienes, sin embargo. El objetivo de las obras de arte en aquella época, en este caso las pinturas, no era patrimonial sino devocional.
-¿En qué época de la historia empieza el arte a adquirir un valor patrimonial?
-Es algo contemporáneo. Por ejemplo, la tabla de la Anunciación del Museo de la Seu se utilizó como refuerzo de la cadereta del órgano barroco. En el XIX tampoco se demostró un gran interés patrimonial. Con la desamortización eclesiástica se perdieron muchas piezas que a finales de ese mismo siglo la Arqueológica Lul·liana se ocupó de recuperar.
-¿Se valoraba la figura del pintor como artista?
-No. Se le consideraba un artesano. Nuestra idea de pintor la hemos heredado del Romanticismo. El artista cobraba por la importancia dimensional del retablo. Los más importantes se encargaban a los talleres más afamados.
-¿Cuál es la temática principal de la pintura de 1390 a 1520?
-La mariana y la hagiográfica, sin duda.
-¿Por qué Mallorca fue un centro importante de producción de tablas góticas?
-Porque se encontraba en el centro del Mediterráneo, participaba en el gran comercio y absorbía las mejores influencias extranjeras. Por ejemplo, contamos con muchos retablos de tipología italiana que Cataluña y Valencia no cultivaron, porque los promotores mallorquines de arte eran familias adineradas que se dedicaban al comercio exterior y encargaban lo que veían en otras partes del mundo. Por ejemplo, el taller de Pere Terrencs manejaba grabados nórdicos poco usados en la Península.
-Las instituciones no promocionan demasiado este tipo de arte ni los museos que lo muestran.
-Sólo te diré que el otro día leí una entrevista al director del Reina Sofía, Borja-Villel, que decía que los museos están llenos. Y pensé: "Sí, pero no en Mallorca". De todos modos, falta que el ciudadano de aquí haga más vida cultural.