22 de juliol 2009

Patrimonio suspende el proyecto de rehabilitación de Can Oleo

diariodemallorca.es 22-7-2009


La UIB no podrá inaugurar en octubre el edificio, que sufre un nuevo retraso en las obras al haberse denegado la instalación de una pasarela


Can Oleo tiene una escalera gótica única en España. Foto: B. Ramon

M. ELENA VALLÉS. PALMA. Segundo y definitivo ´no´ al proyecto de reforma de Can Oleo, firmado por los arquitectos Pere Nicolau y su hija Mariona. "Hemos suspendido definitivamente la propuesta de la pasarela para que presenten de una vez una nueva solución. El ayuntamiento ya tiene un proyecto nuevo y esperamos que lo traigan ya", declaró ayer el director insular de Patrimonio, Biel Cerdà. La medida, una manera de presionar para agilizar los trámites de una reforma que lleva dos años de retraso.
El pasado mes de marzo, tanto Cort como el Consell denegaron la modificación del proyecto redactada por Nicolau que convenía colocar una pasarela móvil entre las dos alas del edificio a través del primer piso, cosa que supondría ampliar el volumen de la construcción, algo totalmente prohibido al tratarse de un Bien de Interés Cultural (BIC). Las obras en la construcción, que arrancaron en 2006, continúan a ritmo lento. El pasado diciembre se anunció la posibilidad de que la reforma estuviera terminada a mediados de este año, fecha que ha vuelto a incumplirse.
Han pasado más de tres años desde el inicio de la rehabilitación y todo han sido contratiempos desde entonces: cambios en el proyecto inicial, hallazgos inesperados, falta de financiación por parte del Govern balear y, ahora otra vez, nuevas modificaciones en la reforma. Los anhelos de la UIB por inaugurar el edificio en octubre con el inicio del curso académico se vuelven a ver truncados. Las comisiones de Patrimonio cuelgan ahora el cartel de vacaciones, y no volverán a retomarse en septiembre, mes en que la UIB podrá volver a presentar el proyecto modificado con otra solución a la pasarela propuesta y rechazada por los técnicos del Consell.
Los trabajos en la cubierta del edificio del siglo XV –y propiedad de la universidad– ya están terminados. Y la obra mayor ya está acabada. Del edificio de 1497 se han preservado los elementos patrimoniales más importantes. Destaca la escalera gótica, única en su género de todo el Estado.
La UIB adquirió Can Oleo en 1994, después de haber estado cerrado cerca de 20 años y en un estado de conservación deficiente.
La universidad espera que el edificio tenga una función de representación institucional. En la primera planta estarán los despachos de la rectora y los vicerrectores, además de una sala de juntas que también acogerá el Consell Social. El segundo piso estará conformado por diversas aulas para másters, y en la planta baja habrá un servicio de comunicación y un punto de información para los alumnos, el bar y la librería universitaria.
Con una superficie de 2.068 metros cuadrados, se prevé que la reforma de Can Oleo cueste 4,5 millones de euros, que serán abonados íntegramente por el Consorci pel Foment d´Infraestructures Universitàries del Govern, que hace dos años hizo peligrar la iniciativa porque no aportaba fondos.