diariodemallorca.es 27-1-2009
M. ELENA VALLÉS. PALMA. El presidente del Círculo de Bellas Artes, Gaspar Sabater, avanzó ayer a este diario que "lo más probable es que el legado de Balaguer, tal y como prevé Cort, se quede en el casal", así como la biblioteca del Círculo de Bellas Artes, "cuyos dos mil o tres mil títulos se incorporarían a la nueva biblioteca que está previsto que se conforme en el edificio una vez haya sido rehabilitado".
El día 31 de marzo expira el tiempo que tiene el Círculo de Bellas Artes para abandonar el Casal. En ese ínterin, el Ayuntamiento deberá cotejar con sus técnicos un inventario que realizó Caja Madrid hace cuatro años, pues la caja de ahorros firmó un convenio con el consistorio para colaborar en la restauración integral de este casal mallorquín.
Este inventario recoge, tal y como indica Sabater, la colección de cuadros de Toni Gelabert, mobiliario de valor, cerámicas y objetos varios. La intención del Ayuntamiento es que todo este legado se mantenga en el futuro dentro del casal. La planta principal, tal y como señala Sabater, fue amueblada por Balaguer. "Una vez esté reformado el edifico, se seguirán manteniendo todas estas piezas".
Además de la pinacoteca de Toni Gelabert, también hay cuadros que pertenecen al Círculo de Bellas Artes, que deberán incluirse en un segundo inventario, en este caso el del propio Círculo, que incluiría "muebles sin valor, algunas sillas y la biblioteca del Círculo, cuyos títulos se cederán a la biblioteca que allí se construya una vez esté reformado el Casal".
El Círculo, que contará en el Casal con unas dependencias administrativas una vez terminadas las obras, necesitará a partir de abril un local desde donde realizar su actividad administrativa. Cort deberá buscarle un local, "que todavía no hemos decidido", señala Nanda Ramon, quien ayer compareció en el pleno para explicar la situación del Casal Balaguer a petición de la oposición.
Las actividades del Círculo que se desarrollen a partir de abril irán celebrándose en distintos locales municipales, en función de su naturaleza, que Cort le cederá.
Sabater explicó también que otra de las partes del Casal que podrá volver a contemplarse después de la nueva obra es la parte de atrás, donde, tras la catas arqueológicas realizadas cuando se llevó a cabo el proyecto de rehabilitación, se halló la parte de un edificio medieval.
La rehabilitación integral del edificio, trabajada por los arquitectos Francesc Pizà, María José Duch, Ricardo Flores y Eva Prats, costará cuatro millones de euros.