La entidad impulsa una campaña para proteger el carácter de barrio
Miembros de ARCA posaron con los carteles frente al edificio. Foto: F. H.
F. H. PALMA. La Associació per a la Revitalització dels Centres Antics fotografió ayer a un serie de personas frente a un edificio de la calle Rei Sanç, esquina con Reina Maria Cristina, que está a punto de desaparecer. Esta acción simbólica forma parte de una nueva campaña que impulsará la entidad ante la "insensibilidad" y la "ambición" de algunas empresas inmobiliarias y la falta de reacción de los responsables políticos ante este tema.
Las personas sostuvieron carteles donde se leía ´Conservem Palma´ o ´Adéu Palma, adéu´, escenificando una imagen irrepetible de memoria perdida que sirva para "remover conciencias".
Grupo de trabajo
El presidente de ARCA, Joan Pasqual, explicó que desde la entidad quieren proponer la "creación urgente" de un grupo de trabajo para la protección del Eixample. Un organismo que cuente con representación ciudadana, de especialistas, instituciones y políticos.
Tal como manifestó, es necesario modificar la normativa para que se protejan los edificios típicos de los barrios, pues la nuevas construcciones eliminan "la dimensión humana" de las casas.
Miembros de ARCA posaron con los carteles frente al edificio. Foto: F. H.
F. H. PALMA. La Associació per a la Revitalització dels Centres Antics fotografió ayer a un serie de personas frente a un edificio de la calle Rei Sanç, esquina con Reina Maria Cristina, que está a punto de desaparecer. Esta acción simbólica forma parte de una nueva campaña que impulsará la entidad ante la "insensibilidad" y la "ambición" de algunas empresas inmobiliarias y la falta de reacción de los responsables políticos ante este tema.
Las personas sostuvieron carteles donde se leía ´Conservem Palma´ o ´Adéu Palma, adéu´, escenificando una imagen irrepetible de memoria perdida que sirva para "remover conciencias".
Grupo de trabajo
El presidente de ARCA, Joan Pasqual, explicó que desde la entidad quieren proponer la "creación urgente" de un grupo de trabajo para la protección del Eixample. Un organismo que cuente con representación ciudadana, de especialistas, instituciones y políticos.
Tal como manifestó, es necesario modificar la normativa para que se protejan los edificios típicos de los barrios, pues la nuevas construcciones eliminan "la dimensión humana" de las casas.