diariodemallorca.es 10-2-2009
Los integrantes de la junta rectora de la fundación Tren de l´Art visitaron ayer las obras de restauración, financiadas por el Govern y la Unión Europea con 750.000 euros
Maribel París supervisa, junto a su padre, la restauración del edificio de Can Prunera. Foto: Joan Mora.
JOAN MORA. SÓLLER. Las obras de restauración del casal de Can Prunera de Sóller siguen a buen ritmo para que dentro de unos meses pueda abrirse al público el que será un museo dedicado al arte y la arquitectura modernista de Mallorca bajo la gestión de la fundación Tren de l´Art.
Miembros de la junta rectora de esta institución visitaron ayer el casal para comprobar la evolución de los trabajos que pronto llegarán a su fin. El presidente del Ferrocarril de Sóller, Óscar Mayol, precisó que los jardines de la casa podrán ser inaugurados durante la feria de mayo tras su transformación en un auditorio al aire libre. Por lo que se refiere a la apertura del museo, éste no podrá ver la luz hasta agosto. Su inauguración será en las fiestas patronales de Sant Bartomeu.
El casal de Can Prunera fue adquirido por el Ferrocarril de Sóller como contribución al fomento de la cultura. La gestión del edificio fue cedida a la fundación Tren de l´Art que preside Pedro Serra, para su transformación en un museo dedicado al Modernismo. La obra de remodelación cuenta con el apoyo financiero del Govern y la Unión Europea que le dedican unos 750.000 euros, aunque el presupuesto inicial se ha visto desbordado por los contratiempos que han ido surgiendo durante las obras. El principal, la carcoma que había deteriorado buena parte de la estructura de vigas de madera de las diferentes plantas y que obligó a cambiar los forjados manteniendo los cielos rasos.
Maribel París, que junto a su padre se encarga de supervisar la restauración del edificio, explicó que las obras se encuentran en una fase bastante avanzada. París explicó que ahora un maestro escayolista está trabajando en la restauración de los ornamentos de los cielos rasos y cenefas que hay en las diferentes estancias del inmueble. Este operario incluso ha reconstruido la decoración de la claraboya que da luz a la escalera interior que con las filtraciones de agua del tejado había quedado seriamente deteriorada. Un artesano de Campos ha reproducido las baldosas hidráulicas idénticas a las existentes a la casa. La técnico destacó que con la retirada de los empapelados de las paredes con que se redecoró la casa en los años sesenta han aparecido pinturas originales que serán restauradas.
El Casal de Can Prunera se convertirá en un museo dedicado al Modernismo. Además de recuperar la casa y su mobiliario a su estado original, el edificio alojará dos salas de exposiciones. Una de ellas será para exposiciones temporales, mientras que en el desván se habilitará una exposición permanente de pintura dedicada a artistas de principios del siglo XX.