El tratamiento en cerámica vidriada en el arco de entrada y las inscripciones de la fachada son los elementos más llamativos del proyecto
Elías Torres inaugurará en abril su intervención contemporánea en la iglesia dels Sagrats Cors
MIGUEL VICENS. PALMA. "Una intervención discreta, respetuosa con el pasado del templo, pero a la vez atrevida y absolutamente contemporánea". El arquitecto ibicenco Elías Torres está a punto de concluir su proyecto de restauración de la fachada y el portal de la iglesia dels Sagrats Cors, que se inaugurará a mediados de abril, impulsado por la Fundació Amics del Patrimoni, los misioneros del Sagrats Cors, titulares del templo, y el grupo Barceló, que ha financiado la intervención con un total de 300.000 euros.
Entre andamios y totalmente cubierta por una tela, puesto que los trabajos no se han dado por finalizados, la restauración permite descubrir ya al viandante algunos de sus aspectos más destacados. Sobre el portal aparece, junto al grabado de un árbol, una inscripción pintada en dorado y almagre que reproduce una frase de Ramon Llull extraída de la obra Blanquerna: "Ador-te amant" (Te adoro amando), en un tipo de letra muy similar a la conocida Type Writer característica de las antiguas máquinas de escribir.
El marés de la parte superior del arco de entrada, que la restauración ha descubierto, se exhibe ahora vestido con unas vetas doradas construidas en cerámica vidriada que serpentean su superficie y realzan la presencia del escudo que preside la entrada. Y el portón que cierra el acceso al templo, de forma cuadrangular, se ha construido en un metal de color rosáceo.
Por estos detalles que alejan la intervención de Torres de una restauración historicista, la última comisión de Patrimonio del Consell de Mallorca aprobó una modificación del Plan General de Ordenación Urbana de Palma referida especialmente a la ficha del catálogo de la iglesia del Sagrats Cors, un cambio que dio vía libre a una restauración que "sin esconder su carácter contemporáneo, sea coherente con el resto de la fachada".
"Será una obra muy novedosa, pero a la vez muy coherente con el espíritu del templo", aseguró ayer Joan Pascual, secretario de ARCA y socio de la Associació d´Amics del Patrimoni.
"A la iglesia dels Sagrats Cors le faltaba la fachada barroca que le correspondía por época de construcción. Sólo tenía el escudo. Por eso, las condiciones de la intervención determinaron que la obra fuera coherente con el interior del templo y a la vez supusiera una aportación contemporánea, nada falsamente histórico", indicó. "Los valores espirituales del templo salen de él por la puerta. Y de la misma manera que Gaudí hace un tapiz en el altar mayor de la Seu que parece moverse con la idea del Dios palpitante que lo anima, la inscripción en la fachada de Ramon Llull quiere ser como el pendón que cuelga de las antiguas casas mallorquinas, aunque el elemento decorativo más llamativo es el que decora la parte superior del arco. Aprovechando que el escudo estaba situado en ese arco que no se conocía hasta ahora, se ha rodeado de un tratamiento cerámico que en vetas describe pequeños trazos por los alrededores", detalla Pascual, que define el proyecto de Elías como "atrevido y atractivo". Y añade: "Todo lo que se ha hecho en el edificio tiene una voluntad de permanencia, porque el patrimonio es una cosa de siglos", asegura.
El proyecto de Torres no se ha desarrollado en su totalidad, aunque ha alcanzado un rosetón que no estaba previsto inicialmente. La idea inicial era más compleja. En ella la fachada se proyectaba sobre la calzada, pero Cort la consideró innecesaria, porque ya intervino en la misma calle hace muy poco tiempo. No obstante, todavía falta añadir una rampa meticulosamente diseñada por el arquitecto que facilitará el acceso al templo.
Elías Torres inaugurará en abril su intervención contemporánea en la iglesia dels Sagrats Cors
MIGUEL VICENS. PALMA. "Una intervención discreta, respetuosa con el pasado del templo, pero a la vez atrevida y absolutamente contemporánea". El arquitecto ibicenco Elías Torres está a punto de concluir su proyecto de restauración de la fachada y el portal de la iglesia dels Sagrats Cors, que se inaugurará a mediados de abril, impulsado por la Fundació Amics del Patrimoni, los misioneros del Sagrats Cors, titulares del templo, y el grupo Barceló, que ha financiado la intervención con un total de 300.000 euros.
Entre andamios y totalmente cubierta por una tela, puesto que los trabajos no se han dado por finalizados, la restauración permite descubrir ya al viandante algunos de sus aspectos más destacados. Sobre el portal aparece, junto al grabado de un árbol, una inscripción pintada en dorado y almagre que reproduce una frase de Ramon Llull extraída de la obra Blanquerna: "Ador-te amant" (Te adoro amando), en un tipo de letra muy similar a la conocida Type Writer característica de las antiguas máquinas de escribir.
El marés de la parte superior del arco de entrada, que la restauración ha descubierto, se exhibe ahora vestido con unas vetas doradas construidas en cerámica vidriada que serpentean su superficie y realzan la presencia del escudo que preside la entrada. Y el portón que cierra el acceso al templo, de forma cuadrangular, se ha construido en un metal de color rosáceo.
Por estos detalles que alejan la intervención de Torres de una restauración historicista, la última comisión de Patrimonio del Consell de Mallorca aprobó una modificación del Plan General de Ordenación Urbana de Palma referida especialmente a la ficha del catálogo de la iglesia del Sagrats Cors, un cambio que dio vía libre a una restauración que "sin esconder su carácter contemporáneo, sea coherente con el resto de la fachada".
"Será una obra muy novedosa, pero a la vez muy coherente con el espíritu del templo", aseguró ayer Joan Pascual, secretario de ARCA y socio de la Associació d´Amics del Patrimoni.
"A la iglesia dels Sagrats Cors le faltaba la fachada barroca que le correspondía por época de construcción. Sólo tenía el escudo. Por eso, las condiciones de la intervención determinaron que la obra fuera coherente con el interior del templo y a la vez supusiera una aportación contemporánea, nada falsamente histórico", indicó. "Los valores espirituales del templo salen de él por la puerta. Y de la misma manera que Gaudí hace un tapiz en el altar mayor de la Seu que parece moverse con la idea del Dios palpitante que lo anima, la inscripción en la fachada de Ramon Llull quiere ser como el pendón que cuelga de las antiguas casas mallorquinas, aunque el elemento decorativo más llamativo es el que decora la parte superior del arco. Aprovechando que el escudo estaba situado en ese arco que no se conocía hasta ahora, se ha rodeado de un tratamiento cerámico que en vetas describe pequeños trazos por los alrededores", detalla Pascual, que define el proyecto de Elías como "atrevido y atractivo". Y añade: "Todo lo que se ha hecho en el edificio tiene una voluntad de permanencia, porque el patrimonio es una cosa de siglos", asegura.
El proyecto de Torres no se ha desarrollado en su totalidad, aunque ha alcanzado un rosetón que no estaba previsto inicialmente. La idea inicial era más compleja. En ella la fachada se proyectaba sobre la calzada, pero Cort la consideró innecesaria, porque ya intervino en la misma calle hace muy poco tiempo. No obstante, todavía falta añadir una rampa meticulosamente diseñada por el arquitecto que facilitará el acceso al templo.
Nova portalada de l'Esglèsia dels Sagrats Cors