Sí a nuestro patrimonio

Cartas al director

Francisca Alcover. Palma.

En estos momentos, ARCA (Associació Revitalizació Centres Antics) se halla inmersa en la noble tarea de salvar de la piqueta el cuartel de carabineros, sito en la Colònia de Sant Jordi, desde el cual se coordinaban esfuerzos y medios para el control del contrabando en aquella zona de Mallorca en un pasado no tan remoto. Desde estas páginas mi voz y mi voto a la conservación de este edificio porque si bien su valor arquitectónico y artístico no es muy grande, sí lo es en cuanto a valor testimonial e histórico de nuestra tierra. Si se tira abajo este edificio se va con él parte de nuestra memoria histórica teniendo, de este modo, un elemento menos para explicar a nuestros descendientes lo que ha significado el contrabando en nuestra isla. Apelo a las personas e instituciones que sí pueden hacer para que este edificio se conserve. No hace falta mencionar que este edificio con una adecuada restauración se le podría dar un uso civil: una biblioteca, un centro de salud, un museo, etc. Lo cual redundaría en beneficio directo para la Colònia de Sant Jordi. En nuestra isla, la trayectoria de la conservación de nuestro patrimonio histórico-cultural ha sido más bien errática: la desidia, la falta de interés (o quizá "intereses interesados"), la burocracia, etc. Todo ello, por parte de las instituciones o por parte de los propietarios particulares, ha permitido que mucho de nuestro patrimonio haya caído bajo la piqueta. Demos un voto de confianza al Ayuntamiento de Ses Salines para la conservación del cuartel de carabineros de la Colònia de Sant Jordi.