La totalidad de la cubierta de la iglesia será reemplazada. Foto: LorenzoCARLES MULET.
PALMA. La iglesia del Monasterio de la Real estrenará su remozada cubierta a finales de año. Rehabilitación patrimonial priorizada, su cercana ejecución se confirmó ayer con el convenio de colaboración suscrito por Jaume Carbonero, conseller de Habitatge i Obres Públiques, y Jesús Murgui, Obispo de Mallorca. La restauración, presupuestada en 345.417 euros, comenzará en septiembre.
El Govern balear, "inyección directa", subvencionará el 15% del total, 51.821 euros. Amén de los 53.572 ya consumidos en la valoración y redacción del proyecto; tarea acometida desde la Dirección General de Arquitectura, responsable a la postre de la dirección de obra. El resto del montante -259.062 euros- correrá a cargo del Ministerio de Cultura, derivado del programa que reserva a intervenciones culturales un 1% del subsidio destinado a obra pública.
El conseller confirmó que el acuerdo alcanzado -una acción directa- es "una excepción dentro del marco de colaboración estable" existente con el Obispado; un escenario ya planteado en un convenio previo que ahora se pretende activar y "materializar". "Las acciones deben ser continuadas a lo largo de la legislatura", añadió Carbonero. Pero algunas, como las obras de La Real o las de la iglesia de Felanitx, "no podían esperar más".
Tras una rúbrica con la que se pretende iniciar una "estrecha relación" con la Iglesia, el conseller recordó que su departamento tiene "la voluntad de participar activamente en la rehabilitación del patrimonio arquitectónico balear; una buena parte del cual está en manos de la Iglesia"."Durante muchos años no ha sido una prioridad" reconoció. Ahora, replanteada la situación, ha llegado el momento de "ver que cantidades se pueden destinar a ello". Y de "redireccionar" a la causa los fondos del 1%, y "no a comprar esculturas para adornar las autopistas"
Murgui quiso agradecer las gestiones y "la actitud" de Carbonero, tan necesarias para acometer la rehabilitación de un "edificio de especial importancia para la sociedad mallorquina". Asimismo adelantó que en septiembre se intensificarán las reuniones de la Diócesis con la conselleria, encuentros donde se rescatarán y "agilizarán" algunos "temas pendientes" en cuestión de patrimonio.
El Govern balear, "inyección directa", subvencionará el 15% del total, 51.821 euros. Amén de los 53.572 ya consumidos en la valoración y redacción del proyecto; tarea acometida desde la Dirección General de Arquitectura, responsable a la postre de la dirección de obra. El resto del montante -259.062 euros- correrá a cargo del Ministerio de Cultura, derivado del programa que reserva a intervenciones culturales un 1% del subsidio destinado a obra pública.
El conseller confirmó que el acuerdo alcanzado -una acción directa- es "una excepción dentro del marco de colaboración estable" existente con el Obispado; un escenario ya planteado en un convenio previo que ahora se pretende activar y "materializar". "Las acciones deben ser continuadas a lo largo de la legislatura", añadió Carbonero. Pero algunas, como las obras de La Real o las de la iglesia de Felanitx, "no podían esperar más".
Tras una rúbrica con la que se pretende iniciar una "estrecha relación" con la Iglesia, el conseller recordó que su departamento tiene "la voluntad de participar activamente en la rehabilitación del patrimonio arquitectónico balear; una buena parte del cual está en manos de la Iglesia"."Durante muchos años no ha sido una prioridad" reconoció. Ahora, replanteada la situación, ha llegado el momento de "ver que cantidades se pueden destinar a ello". Y de "redireccionar" a la causa los fondos del 1%, y "no a comprar esculturas para adornar las autopistas"
Murgui quiso agradecer las gestiones y "la actitud" de Carbonero, tan necesarias para acometer la rehabilitación de un "edificio de especial importancia para la sociedad mallorquina". Asimismo adelantó que en septiembre se intensificarán las reuniones de la Diócesis con la conselleria, encuentros donde se rescatarán y "agilizarán" algunos "temas pendientes" en cuestión de patrimonio.