Última Hora Digital 4-4-2010
¿Qué aspecto tendrán dentro de cuatro siglos los libros que salen hoy de imprenta?, ¿garantizamos su perdurabilidad suficientemente?, ¿utilizamos el mejor papel para ello?, ¿se emplean las tintas más apropiadas?, ¿cuidamos su conservación?... El estudio y el análisis de volúmenes de antaño nos puede dar muchas pistas al respecto. Recuperando piezas históricas, hoy podemos concluir que el paso de los siglos y, a veces, una conservación poco ortodoxa han imposibilitado la consulta y manipulación de muchos libros. Éste es el caso de Determinatiorum, una obra manuscrita del siglo XVII que recoge actas y apuntes farmacéuticos de diferentes autores, y que forma parte del Arxiu Farmacèutic de la Biblioteca Lluís Alemany.
El taller de restauración del Arxiu de Mallorca trabaja en el saneamiento completo de este archivo, de 18 volúmenes, que fue donado por Lluís Alemany al Consell de Mallorca en los años noventa y que ahora está al alcance de investigadores y estudiosos en La Misericòrdia.
Las tintas metaloácidas empleadas en aquellos siglos para la escritura han provocado una oxidación del papel y pérdida de trozos por desintegración. Por ello, la restauradora Montse Furment ha trabajado en la limpieza de las páginas y en la consolidación de los textos mediante papel japonés. «El objetivo fundamental es mantener la integridad del documento», subraya la restauradora, quien detalla que el libro se encontraba en bastante mal estado. Por ello, tuvo que, en primer lugar, descoserlo para tratarlo hoja a hoja, siempre con «procedimientos neutros y reversibles», y volver a unir las 254 páginas «respetando los puntos de costura» mediante cordón de badana. Respecto a las cubiertas de pergamino policromadas, Furment las ha limpiado la suciedad superficial y rehidratado, ofreciendo un aspecto más claro y legible.
La obra regresa ahora a La Misericòrdia protegida en cajas «de PH Neutro» para alargar la vida de estas piezas históricas lo máximo posible.