05 de juliol 2010

El Temple desde el islam al cristianismo


diariodemallorca.es 5-7-2010

Los arqueólogos de la antigua almudaina de Gumara descubren las fases del edificio desde sus orígenes hasta el día de hoy


El arqueólogo Llorenç Vila pica una pared para llegar al muro original. Foto: Element

RAQUEL GALÁN. PALMA. Los arqueólogos ya saben qué elementos de las antiguas torres del Temple se deben eliminar. Tras varios meses de minucioso trabajo, han llegado a los orígenes de este edificio, lo que queda de su construcción como fortificación islámica. De las diez torres sólo se conservan dos, aunque éstas servirán para aprender cómo era antaño la almudaina de Gumara.
La empresa de arqueología Elements, contratada por el Ayuntamiento, acaba de dar a conocer los resultados de su análisis y ahora son las administraciones públicas, Cort y el Consell de Mallorca, quienes tienen que decidir hasta dónde llegará la recuperación del pasado medieval. Es un monumento declarado Bien de Interés Cultural (BIC), lo que significa que cualquier actuación tiene que encaminarse a preservar sus orígenes.
Sin embargo, también es necesario un estudio arquitectónico de la estructura para conocer qué soluciones constructivas deberían adoptarse para la eliminación de los elementos añadidos, como el cuerpo central, levantado en el siglo XIX.
Lo que se conoce por el momento, a la espera de los resultados de las dataciones mediante carbono 14, es que la fortaleza fue construida a principios del siglo XII. El material cerámico recuperado por los arqueólogos Llorenç Vila y Noemi Prats así lo atestiguan. Algunos hallazgos están muy bien conservados, como por ejemplo la mayoría de las almenas originales, que representan los salientes verticales que coronaban ambas torres y permitían la defensa con cierta protección desde la parte más alta del edificio. Estas almenas se encuentran un metro y medio por debajo de las ahora visibles, detalla Prats. Otro elemento original que está previsto recuperar son las saeteras halladas, así como una cámara de tiro descubierta en lo que hoy es el tercer piso del edificio. Las aberturas en los muros que servían para disparar han permanecido ocultas debido a las reformas posteriores.
La intención de Cort es que el proyecto de intervención esté a principios de año. Este edificio municipal se convertirá en un monumento musealizado, es decir, se facilitará la lectura del edificio para que los visitantes puedan comprender desde el exterior su funcionalidad original.
Tras repicar las paredes y excavar el subsuelo en extensión, donde se encontró un sistema de gestión de agua anterior a las torres, los arqueólogos terminaron su trabajo. Su estudio servirá para conocer mejor la antigua Madina Mayurqa.