diariodemallorca.es 23-1-2009
Ollers repasó en la cena los hechos que afectaron al patrimonio. Foto: Arca
M. E. V. PALMA. La Associació per a la Revitalització del Centres Antics (ARCA) falló anteayer sobre lo mejor y lo peor del año en cuanto a preservación del patrimonio mallorquín. La Fundación Yannick y Ben Jakober fue reconocida con el premio Blanc por su labor de promoción artística y cultural en la finca Sa Bassa Blanca, en Alcúdia. El toque de atención, a través del galardón Negre, fue para la destrucción del Quarter de Carabiners de la Colònia de Sant Jordi.
La asociación proteccionista mostró su convencimiento de que el antiguo cuartel "puede y se debe recuperar, porque no podemos perder más patrimonio histórico en la isla". El 60% de los votos para el galardón negativo, ejercidos en una cena, se decantaron hacia el cuartel. Los otros candidatos fueron Manolo March, por la venta en Christie´s del mobiliario de Son Galcerán, y los responsables de la destrucción de Son Santiscle (Palma), que se repartieron a partes iguales el resto de dictámenes.
Más racionadas estuvieron las decisiones para elegir el galardón positivo. Sa Bassa Blanca se llevó el 30% de los votos. Las tres candidaturas restantes –la exposición fotográfica del archivo de la familia Escalas, la rehabilitación de Can Prunera o la actividad de Milana, Foment del Patrimoni a Puigpunyent– estuvieron empatadas.
Tras la cena, Pere Ollers, presidente de ARCA, resumió los acontecimientos que afectaron al patrimonio isleño durante 2009. Destacó las pérdidas de Son Mosson y Ca ses Bieles, patrimonio de Calvià. Y alabó la capacidad de rectificación del concejal de Palma Francisco Donate por evitar la pérdida del puente sobre el Mal Pas, ahora pendiente de rehabilitación. Por último, Ollers se congratuló por el Premi Ciutat de Palma de Arquitectura que fue para el portal de Sant Gaietà, un proyecto impulsado por la asociación.
Premis Blanc i Negre del Patrimoni de l'any 2009