El futuro de una de las propiedades adquiridas con fondos de la ecotasa
Buils dice que el recinto museográfico, que abrirá en breve, potenciará las visitas, pero recuerda que la finca tiene "límites"
Buils dice que el recinto museográfico, que abrirá en breve, potenciará las visitas, pero recuerda que la finca tiene "límites"
I. MOURE. PALMA. El centro de interpretación de la finca pública de Son Real, en Santa Margalida, se inaugurará antes de que acabe el verano y permitirá potenciar sobremanera la llegada de visitantes, según afirmó ayer el conseller de Turismo, Francesc Buils. La Fundación para el Desarrollo Sostenible de las Balears, que gestiona la finca, prevé que puedan visitar Son Real hasta 20.000 personas al año. Durante este año, se han recibido unas 4.500 visitas.
En cualquier caso, explicó Buils, se trata de un "espacio que deberá tener límites" a la hora de recibir gente, puesto que se han de preservar sus "importantes" valores naturales. Son Real, con una superficie de 395 hectáreas, fue comprada hace dos legislaturas por el anterior Govern del Pacto de Progreso gracias a los fondos recaudados a través de la polémica ecotasa.
El conseller no quiso desvelar muchos detalles del nuevo centro de interpretación, pero sí avanzó que "será una maravilla". Según dijo, será un espacio que se dedicará a la divulgación antropológica e histórica de la finca. En dicho centro, agregó, se recogerán los "usos y costumbres de la zona, la gestión de espacios agrarios y naturales", así como la historia de las diferentes culturas que poblaron el lugar.
Buils destacó también que sigue avanzando el proyecto de ubicar un centro arqueológico en Son Real, aunque éste se halla en estado más embrionario que el de interpretación.
Actuaciones de conservación
Buils ofreció estos datos tras la firma de un protocolo de colaboración con el conseller de Medio Ambiente, Miquel Àngel Grimalt, por el cual este departamento autonómico realizará labores de conservación en la finca de Son Real.
De acuerdo a la explicación ofrecida por Grimalt, la Conselleria emprenderá actuaciones en cuestiones de prevención y extinción de incendios, educación ambiental, caza y protección de especies, torrentes, calidad ambiental, desarrollo sostenible y cambio climático.
"Queremos que Son Real sea un referente ambiental y turístico", afirmó el conseller, quien resaltó la importancia de apostar por Balears "como destino natural". Además enumeró los "valiosos elementos" con que cuenta la finca, entre los cuales citó "las casas de ´possessió´, los lugares funerarios prehistóricos y los ecosistemas dunares".
El conseller no precisó la cuantía económica del protocolo suscrito. De hecho, el acuerdo establece que "el presente protocolo no supone ningún gasto ni obligación económica para las partes firmantes". A continuación, se señala que las "posibles obligaciones económicas" se determinarán con "convenios específicos". La Conselleria llevará a cabo sus actuaciones a través de los organismos públicos Institut Balear de la Natura, Espais de Natura Balear y Agència Balear de l´Aigua y Qualitat Ambiental. Miembros de estas entidades, junto a representantes de la Fundación para el Desarrollo Sostenible, integrarán una comisión de seguimiento para analizar el tipo de medidas a adoptar. La duración del acuerdo es de tres años.
A la hora de valorar el protocolo firmado, el conseller Buils remarcó que la apuesta por Son Real contribuye a luchar contra la estacionalidad en una zona rodeada de municipios turísticos.
En cualquier caso, explicó Buils, se trata de un "espacio que deberá tener límites" a la hora de recibir gente, puesto que se han de preservar sus "importantes" valores naturales. Son Real, con una superficie de 395 hectáreas, fue comprada hace dos legislaturas por el anterior Govern del Pacto de Progreso gracias a los fondos recaudados a través de la polémica ecotasa.
El conseller no quiso desvelar muchos detalles del nuevo centro de interpretación, pero sí avanzó que "será una maravilla". Según dijo, será un espacio que se dedicará a la divulgación antropológica e histórica de la finca. En dicho centro, agregó, se recogerán los "usos y costumbres de la zona, la gestión de espacios agrarios y naturales", así como la historia de las diferentes culturas que poblaron el lugar.
Buils destacó también que sigue avanzando el proyecto de ubicar un centro arqueológico en Son Real, aunque éste se halla en estado más embrionario que el de interpretación.
Actuaciones de conservación
Buils ofreció estos datos tras la firma de un protocolo de colaboración con el conseller de Medio Ambiente, Miquel Àngel Grimalt, por el cual este departamento autonómico realizará labores de conservación en la finca de Son Real.
De acuerdo a la explicación ofrecida por Grimalt, la Conselleria emprenderá actuaciones en cuestiones de prevención y extinción de incendios, educación ambiental, caza y protección de especies, torrentes, calidad ambiental, desarrollo sostenible y cambio climático.
"Queremos que Son Real sea un referente ambiental y turístico", afirmó el conseller, quien resaltó la importancia de apostar por Balears "como destino natural". Además enumeró los "valiosos elementos" con que cuenta la finca, entre los cuales citó "las casas de ´possessió´, los lugares funerarios prehistóricos y los ecosistemas dunares".
El conseller no precisó la cuantía económica del protocolo suscrito. De hecho, el acuerdo establece que "el presente protocolo no supone ningún gasto ni obligación económica para las partes firmantes". A continuación, se señala que las "posibles obligaciones económicas" se determinarán con "convenios específicos". La Conselleria llevará a cabo sus actuaciones a través de los organismos públicos Institut Balear de la Natura, Espais de Natura Balear y Agència Balear de l´Aigua y Qualitat Ambiental. Miembros de estas entidades, junto a representantes de la Fundación para el Desarrollo Sostenible, integrarán una comisión de seguimiento para analizar el tipo de medidas a adoptar. La duración del acuerdo es de tres años.
A la hora de valorar el protocolo firmado, el conseller Buils remarcó que la apuesta por Son Real contribuye a luchar contra la estacionalidad en una zona rodeada de municipios turísticos.