Última Hora Digital 5-7-2010
M.Díaz. Restos óseos de hasta 12 individuos de ambos sexos y de todas las edades, incluso de fetos, es el resultado del hallazgo que ha hecho el arqueólogo Javier Aramburu en «una covacha de dos por dos metros», en Alaró, durante la primera etapa de una excavación en una finca particular de la zona denominada Es Puig. Lo importante del descubrimiento, asegura, es que, «por primera vez, nos hemos encontrado cara a cara con los que construyeron los talayots». La prueba del carbono 14 ha datado estos huesos entre el 1000 y el 800 antes de Cristo.
Hasta ahora, explica, los investigadores tenían controladas las etapas anterior y posterior, es decir, la cultura pretalayótica y la baleárica, «pero nunca se habían encontrado restos de los que habían construido los talayots». «Hubo algunos hallazgos en la cueva de Son Matge, en Valldemossa, pero son discutidos por la comunidad científica», añade.
La covacha está situada al lado de un gran túmulo «o plataforma escalonada de unos veinte metros de diámetro por unos siete de altura» que excavarán en una segunda campaña. Lo harán en busca de una relación entre ambos y también si el túmulo «estaba relacionado con los ritos funerarios».
Por el momento «sabemos que hay un orificio sellado», con lo que puede que el trabajo les depare otras sorpresas, apunta Aramburu.
En cuanto a los restos óseos, que estaban acompañados por unas 150 vasijas, Aramburu interpreta que pertenecían a una familia, aunque «desconocemos su importancia dentro del poblado». Lo que sí tiene claro es que cada fallecido era enterrado con cerámica, «que tenemos que analizar para saber que contenía». Además, «al costado del cúmulo hay un taller de alfarero donde hacían esta cerámica, con la arcilla preparada para trabajarla, con las herramientas y el fuego donde la cocían». De los huesos enterrados en la covacha se desprenden algunos ritos, «como que los cadáveres se enterraban completos, no se descarnaban en otro sitio ni se quemaban, se depositaban en la cueva».
En esta excavación, finaliza, «vamos en busca de datos, nos interesa recoger huesos, cerámica, lo que buscamos son datos».