diariodemallorca.es 13-3-2008
M. E. VALLÉS. PALMA. La junta de la sección de Arqueología del Colegio Oficial de Doctores y Licenciados en Filosofía y Letras de las Illes Balears hizo ayer pública su satisfacción por la aprobación por parte del Consell el pasado 3 de marzo de una multa de 175.000 euros por la destrucción de patrimonio arqueológico en Ses Salines.
La propuesta de la institución insular iba dirigida a sancionar al responsable de las obras que significaron la destrucción parcial de dos yacimientos arqueológicos, Sa Marina Gran y Sa Carrtoja, ambos declarados como Bienes de Interés Cultural de ese municipio.
El presunto autor de los hechos estaba realizando obras en un solar, situado en la calle Esperança número 13 de la localidad, para elevar un edificio entre los tabiques de unos locales y unos aparcamientos. El 23 de octubre de 2006 fue denunciado por un vecino por supuesta destrucción de dos necrópolis en ese terreno.
Por todo ello, el Consell aprobó un expediente sancionador contra el presunto promotor de las obras, medida que el colectivo de arqueólogos considera fundamental y como un precedente para continuar persiguiendo y multando la destrucción de patrimonio arqueológico. Pese a todo, no dejan de señalar que esperan que esta sanción llegue a ser firme, "no como en otras ocasiones", y que el culpable pague por su delito.