diariodemallorca.es 6-3-2208
La construcción, afeada por dos señales de tráfico y cubierta por una enredadera, data de 1656, cuando Palma acogió un lazareto
La puerta de entrada al parque de Sa Quarentena, apenas visible tras la enredadera. Foto: Arca
M. CUART. PALMA. Con más de tres siglos y medio de historia a sus espaldas, la puerta de entrada al parque de Sa Quarentena, hecha de marés y arco de medio punto y ubicada en la confluencia entre la plaza Mediterrània y la palmesana calle Patrimoni, muestra su parte superior completamente oculta por una enredadera, y sus lados están flanqueados por dos señales de tráfico que impiden apreciar en toda su magnitud el último vestigio del primer lazareto español, donde se atendían a afectados por enfermedades contagiosas y con una pared que podría haber servido en labores de defensa, según se desprende del texto de Ángel Aparicio El recinto portuario de Palma y la defensa.
Por todo ello, ARCA solicita al consistorio palmesano que retire la enredadera, que cubre una inscripción de 1656 para la que solicita también iluminación y tapa además un escudo real en el centro, flanqueado por los dos de la ciudad de Palma, y que busque una solución para impedir que las señales empobrezcan el patrimonio."Es una cuestión de sensibilidad y de buscar una fórmula singular para cada lugar", señaló Juan Pascual, secretario de ARCA, sobre la voluntad colaboradora del consistorio, que no pone en duda.
Su asociación pide respeto a lo establecido en el catálogo patrimonial, donde se establece que "habrá que ir con cuidado con el tipo de hiedras o plantas enredaderas que se dejen crecer, que pueden afectar a los mareses y a la visibilidad de las puertas", así como que "habrá que eliminar la zona de estacionamiento de vehículos que se extiende delante y las dos señales de tráfico que hay".